ElGatsbyPobre
REGISTRADO
----- Atributos Físicos y Generales
1) Estilo de trabajo: independiente.
2) Edad: dice tener 19, pero aparenta unos 25, tal vez más.
3) Color de piel: blanca
4) Estatura: 1.55 cm aprox.
5) Cara: no es hermosa, pero tiene una cara bonita.
6) Senos: pequeños
7) Cola: pequeña, de lolita, natural.
----- Atributos NO Físicos
8) Aseo: muy aseada, llegó recién bañada y oliendo delicioso.
9) ¿Da besos?: sí, besitos, sin lengua.
10) Calidad del oral / anal: oral bueno, con preservativo.
11) Tarifa: 120 mil pesos la hora, más 20 de taxis.
----- Otros Atributos
12) Calidad del sitio: excepcional.
13) En dónde fue el servicio: en mi apartamento.
14) ¿Es como las fotos?: sí y no. Es muy similar, pero las fotos son antiguas.
15) Calificación final: 9 de 10
16) Comentario general: Aclaro que esta chica la caté hace un par de meses.
Una noche, estando en mi casa, en meditabunda soledad, pensé que sería bueno y deseable si contactaba una chica para que me visitara al día siguiente. Generalmente me gusta planear bien y con anticipación los encuentros sexuales que sostengo. Vine a este mismo foro a leer reseñas y buscar una buena recomendación. Así llegué a Emily. En el foro encontré reseñas positivas y otras que no la dejaban tan bien parada. Sin embargo, las buenas reseñas y las descripciones de sus atributos físicos me motivaron a escribirle. Me gustan las mujeres pequeñas y delgadas, en las fotos se veía bien así que la contacté. A pesar de ser tarde en la noche, Emily, me respondió rápido y acordamos vernos en mi casa el día siguiente. La tarifa por una hora eran 120 mil pesos y 20 mil pesos para los taxis. Siempre prefiero que las chicas vengan a mi casa, me gusta un lugar limpio y cómodo, pero a veces es difícil encontrar esto en los hoteles donde las chicas suelen atender.
Al día siguiente, a eso del mediodía, hablé de nuevo con Emily para enviarle 20 mil pesos por nequi para los taxis. Así lo hicimos y a las tres de la tarde arribó a mi domicilio. Llamaron a mi puerta y me dirigí a abrirle. Cuando la vi me encontré con una mujer joven, delgada y de baja estatura, de cara bonita con y sonriente, llevaba gafas lo que suma mucho para mí (tengo un gusto especial por las mujeres que usan gafas) y el cabello corto a la altura de los hombros. La hice pasar con toda la amabilidad que demandan estos casos. Pienso que es preciso tratar de la mejor manera a las chicas que nos prestan sus servicios pues, de entrada, hacer que el ambiente sea agradable suma muchos puntos al servicio en general. Ya en la sala le ofrecí algo de tomar y le regalé una chocolatina.
Pasamos a la habitación y le pedí que se pusiera cómoda. Empezamos a hablar de banalidades mientras nos acomodábamos y nos desnudábamos. Al final ella se quedó con sus gafas y una tanguita rosa. En ese momento pude detallar con mejor precisión su cuerpo y atributos. Vi una hermosa piel blanca, que luego comprobé era tan suave como parecía; un cuerpo pequeño, de lolita, bien proporcionado; los senos eran pequeños, con unos pezones canelita que ya estaban paraditos; su abdomen tenía un poco de estrías, pero a mí no me molestan ni me parecen feas; las piernas eran muy lindas, delgadas, bien proporcionadas de acuerdo a su cuerpo; la cola pequeña, redondita, muy suave. Yo en este punto ya estaba desnudo y con una erección que avisaba los hechos que vendrían. Me subí a la cama donde ella se encontraba de rodillas mientras me miraba juguetona y me sonreía, me invitaba con su mirada. Me acerqué y la abracé, acaricié su cuerpo y olí su rico aroma. Le di unos besos en el cuello y ella suspiró, me di cuenta que habíamos conectado y que sería una buena tarde. Nos acariciamos lentamente y nos empezamos a tocar nuestros sexos. Su mano era pequeña y apenas alcanzaba a rodear mi pene. Emily carga una bolsita con lubricante, condones y todo lo necesario para prestar su servicio. Sacó un condón de la bolsita y me lo puso, se agachó y empezó a chupar mi pene. Personalmente no me gusta mucho que me hagan sexo oral, mas, ella, lo hizo muy bien. Yo estaba arrodillado y ella me miraba a los ojos mientras se metía todo mi pene hasta el fondo de su garganta, lo sacaba y me miraba con esa misma sonrisa juguetona para luego volver a metérselo todo en su pequeña boca de labios delgados.
Después me pidió que me recostara y así me siguió dando sexo oral. Se puso en cuatro y se agachó para poder hacer mejor su trabajo. Desde donde estaba pude ver lo ricas que se veían esas pequeñas nalgas en esa posición. La idea de estar penetrándola en esa posición me excitó mucho más. El sexo oral fue muy bueno, lamió, chupó, saboreó y se metió a la boca testículos y pene por un buen rato. Luego le pedí que, así como yo me encontraba, se subiera sobre mí. Así lo hizo. Pude sentir una vagina apretada mientras mi pene penetraba en su ser. Apoyó sus manos en mi abdomen y empezó a moverse rítmicamente. Mis inquietas manos acariciaron todo su cuerpo y sus senos, a los que mi boca fue a parar. Chupé, lamí, mordí y succioné sus pezones mientras ella se movía sobre mí y gemía suave y dulcemente.
Luego de un rato así, y cuando noté que se estaba cansando, me levanté con ella en mis brazos y la tiré con fuerza en la cama. Ella lo disfrutó. Me hice sobre ella en misionero y empecé a penetrarla con fuerza y a buen ritmo. Ella subió las piernas y me abrazó con ellas, ayudando a que la fuerza de las embestidas fuera mayor. Nos miramos y nos besamos. Su cuerpo pequeño, delgado y ligero, se siente bien entre los brazos de un tipo de estatura considerable como yo. Da más poder sobre la chica si podemos levantarla, acomodarla, y cargarla como más nos convenga.
Llevábamos como unos veinte minutos desde que todo empezó con nuestra desnudes. Paramos para tomar agua. Sentí la necesidad de ir al baño a orinar y la erección se me bajó un poco. Cuando regresé, Emily, muy dispuesta, se puso a trabajar para recobrar mi erección. Me masturbó mientras nos dábamos algunos besos y nos acariciábamos. La erección no tardó en regresar. De nuevo un condón y otro rato de sexo oral. En este punto estábamos sudorosos, jadeantes. Después del sexo oral le pedí que se pusiera en cuatro. Me quedé un momento admirando esta visión. Su espalda pequeña y estrecha remata en una cintura pequeña y una cadera acorde a su estatura, pero que goza de gracia y sensualidad. Su ano y su vagina se me presentaban completamente. Me acerqué despacio y acaricié su vagina y ano con mis dedos. Agarré sus nalgas con fuerza y la estrujé contra mí. Ella bajó su cuerpo y pegó su pecho contra la cama, estiró sus manos al frente y quedó dispuesta a recibir lo que yo le quisiera dar. Tomé mi pene con la mano y lo fui metiendo despacio en esa vagina que solo esperaba ser penetrada. Así en cuatro copulamos un buen rato, la penetré con buena velocidad y fuerza, ella aguantó bien. En un momento se apoyó también en sus manos, yo la penetré demasiado fuerte y fue al golpearse la cabeza contra la pared. Nos reímos, le pregunté si se encontraba bien a lo que respondió afirmativamente. Entonces, con mi cuerpo, me dejé caer sobre ella, despacio, sin sacarle mi pene, hasta que la tuve acostada. Así seguí penetrándola, cerré sus piernas y su vagina se sentía más estrecha, mi pene se deslizaba sobre sus nalgas en cada penetración, agarré sus manos y la inmovilicé bajo mi peso y voluntad, ella gemía con más fuerza y jadeaba por el cansancio y la falta de aire. Así, en esa posición y situación, eyaculé. Nos quedamos unos minutos en esa misma posición. Luego me levanté y fui a asearme un poco, ella hizo lo mismo. Quedaba como un cuarto de hora del servicio, entonces nos quedamos desnudos en la cama conversando. Emily es buena conversadora, tiene un tono de voz ronquito, es agradable escucharla y es una mujer interesante. Llegada la hora ella se vistió y se marchó.
Me agradó bastante el servicio. Quizá no sea la chica más despampanante, pero tiene cosas que soy muy importantes y valiosas. No es relojera, es buena conversadora, se implica, propone, tiene buen aguante físico, es buena persona, muy aseada. Esta es una opinión muy personal basada en mi experiencia, ya cada uno de los caballeros que visitan este foro y han tenido la amabilidad de leerme han de decidir si merece la pena el servicio con Emily.
17) Teléfono (celular o fijo) Y link web de contacto:
Link: https://co.mileroticos.com/escorts/emily-universitariafotos-100-reales-ven-disfruta-de-mi/25106965/
Teléfono: 3212005043
Ahora creo que está en Bogotá, pero siempre está viniendo.
1) Estilo de trabajo: independiente.
2) Edad: dice tener 19, pero aparenta unos 25, tal vez más.
3) Color de piel: blanca
4) Estatura: 1.55 cm aprox.
5) Cara: no es hermosa, pero tiene una cara bonita.
6) Senos: pequeños
7) Cola: pequeña, de lolita, natural.
----- Atributos NO Físicos
8) Aseo: muy aseada, llegó recién bañada y oliendo delicioso.
9) ¿Da besos?: sí, besitos, sin lengua.
10) Calidad del oral / anal: oral bueno, con preservativo.
11) Tarifa: 120 mil pesos la hora, más 20 de taxis.
----- Otros Atributos
12) Calidad del sitio: excepcional.
13) En dónde fue el servicio: en mi apartamento.
14) ¿Es como las fotos?: sí y no. Es muy similar, pero las fotos son antiguas.
15) Calificación final: 9 de 10
16) Comentario general: Aclaro que esta chica la caté hace un par de meses.
Una noche, estando en mi casa, en meditabunda soledad, pensé que sería bueno y deseable si contactaba una chica para que me visitara al día siguiente. Generalmente me gusta planear bien y con anticipación los encuentros sexuales que sostengo. Vine a este mismo foro a leer reseñas y buscar una buena recomendación. Así llegué a Emily. En el foro encontré reseñas positivas y otras que no la dejaban tan bien parada. Sin embargo, las buenas reseñas y las descripciones de sus atributos físicos me motivaron a escribirle. Me gustan las mujeres pequeñas y delgadas, en las fotos se veía bien así que la contacté. A pesar de ser tarde en la noche, Emily, me respondió rápido y acordamos vernos en mi casa el día siguiente. La tarifa por una hora eran 120 mil pesos y 20 mil pesos para los taxis. Siempre prefiero que las chicas vengan a mi casa, me gusta un lugar limpio y cómodo, pero a veces es difícil encontrar esto en los hoteles donde las chicas suelen atender.
Al día siguiente, a eso del mediodía, hablé de nuevo con Emily para enviarle 20 mil pesos por nequi para los taxis. Así lo hicimos y a las tres de la tarde arribó a mi domicilio. Llamaron a mi puerta y me dirigí a abrirle. Cuando la vi me encontré con una mujer joven, delgada y de baja estatura, de cara bonita con y sonriente, llevaba gafas lo que suma mucho para mí (tengo un gusto especial por las mujeres que usan gafas) y el cabello corto a la altura de los hombros. La hice pasar con toda la amabilidad que demandan estos casos. Pienso que es preciso tratar de la mejor manera a las chicas que nos prestan sus servicios pues, de entrada, hacer que el ambiente sea agradable suma muchos puntos al servicio en general. Ya en la sala le ofrecí algo de tomar y le regalé una chocolatina.
Pasamos a la habitación y le pedí que se pusiera cómoda. Empezamos a hablar de banalidades mientras nos acomodábamos y nos desnudábamos. Al final ella se quedó con sus gafas y una tanguita rosa. En ese momento pude detallar con mejor precisión su cuerpo y atributos. Vi una hermosa piel blanca, que luego comprobé era tan suave como parecía; un cuerpo pequeño, de lolita, bien proporcionado; los senos eran pequeños, con unos pezones canelita que ya estaban paraditos; su abdomen tenía un poco de estrías, pero a mí no me molestan ni me parecen feas; las piernas eran muy lindas, delgadas, bien proporcionadas de acuerdo a su cuerpo; la cola pequeña, redondita, muy suave. Yo en este punto ya estaba desnudo y con una erección que avisaba los hechos que vendrían. Me subí a la cama donde ella se encontraba de rodillas mientras me miraba juguetona y me sonreía, me invitaba con su mirada. Me acerqué y la abracé, acaricié su cuerpo y olí su rico aroma. Le di unos besos en el cuello y ella suspiró, me di cuenta que habíamos conectado y que sería una buena tarde. Nos acariciamos lentamente y nos empezamos a tocar nuestros sexos. Su mano era pequeña y apenas alcanzaba a rodear mi pene. Emily carga una bolsita con lubricante, condones y todo lo necesario para prestar su servicio. Sacó un condón de la bolsita y me lo puso, se agachó y empezó a chupar mi pene. Personalmente no me gusta mucho que me hagan sexo oral, mas, ella, lo hizo muy bien. Yo estaba arrodillado y ella me miraba a los ojos mientras se metía todo mi pene hasta el fondo de su garganta, lo sacaba y me miraba con esa misma sonrisa juguetona para luego volver a metérselo todo en su pequeña boca de labios delgados.
Después me pidió que me recostara y así me siguió dando sexo oral. Se puso en cuatro y se agachó para poder hacer mejor su trabajo. Desde donde estaba pude ver lo ricas que se veían esas pequeñas nalgas en esa posición. La idea de estar penetrándola en esa posición me excitó mucho más. El sexo oral fue muy bueno, lamió, chupó, saboreó y se metió a la boca testículos y pene por un buen rato. Luego le pedí que, así como yo me encontraba, se subiera sobre mí. Así lo hizo. Pude sentir una vagina apretada mientras mi pene penetraba en su ser. Apoyó sus manos en mi abdomen y empezó a moverse rítmicamente. Mis inquietas manos acariciaron todo su cuerpo y sus senos, a los que mi boca fue a parar. Chupé, lamí, mordí y succioné sus pezones mientras ella se movía sobre mí y gemía suave y dulcemente.
Luego de un rato así, y cuando noté que se estaba cansando, me levanté con ella en mis brazos y la tiré con fuerza en la cama. Ella lo disfrutó. Me hice sobre ella en misionero y empecé a penetrarla con fuerza y a buen ritmo. Ella subió las piernas y me abrazó con ellas, ayudando a que la fuerza de las embestidas fuera mayor. Nos miramos y nos besamos. Su cuerpo pequeño, delgado y ligero, se siente bien entre los brazos de un tipo de estatura considerable como yo. Da más poder sobre la chica si podemos levantarla, acomodarla, y cargarla como más nos convenga.
Llevábamos como unos veinte minutos desde que todo empezó con nuestra desnudes. Paramos para tomar agua. Sentí la necesidad de ir al baño a orinar y la erección se me bajó un poco. Cuando regresé, Emily, muy dispuesta, se puso a trabajar para recobrar mi erección. Me masturbó mientras nos dábamos algunos besos y nos acariciábamos. La erección no tardó en regresar. De nuevo un condón y otro rato de sexo oral. En este punto estábamos sudorosos, jadeantes. Después del sexo oral le pedí que se pusiera en cuatro. Me quedé un momento admirando esta visión. Su espalda pequeña y estrecha remata en una cintura pequeña y una cadera acorde a su estatura, pero que goza de gracia y sensualidad. Su ano y su vagina se me presentaban completamente. Me acerqué despacio y acaricié su vagina y ano con mis dedos. Agarré sus nalgas con fuerza y la estrujé contra mí. Ella bajó su cuerpo y pegó su pecho contra la cama, estiró sus manos al frente y quedó dispuesta a recibir lo que yo le quisiera dar. Tomé mi pene con la mano y lo fui metiendo despacio en esa vagina que solo esperaba ser penetrada. Así en cuatro copulamos un buen rato, la penetré con buena velocidad y fuerza, ella aguantó bien. En un momento se apoyó también en sus manos, yo la penetré demasiado fuerte y fue al golpearse la cabeza contra la pared. Nos reímos, le pregunté si se encontraba bien a lo que respondió afirmativamente. Entonces, con mi cuerpo, me dejé caer sobre ella, despacio, sin sacarle mi pene, hasta que la tuve acostada. Así seguí penetrándola, cerré sus piernas y su vagina se sentía más estrecha, mi pene se deslizaba sobre sus nalgas en cada penetración, agarré sus manos y la inmovilicé bajo mi peso y voluntad, ella gemía con más fuerza y jadeaba por el cansancio y la falta de aire. Así, en esa posición y situación, eyaculé. Nos quedamos unos minutos en esa misma posición. Luego me levanté y fui a asearme un poco, ella hizo lo mismo. Quedaba como un cuarto de hora del servicio, entonces nos quedamos desnudos en la cama conversando. Emily es buena conversadora, tiene un tono de voz ronquito, es agradable escucharla y es una mujer interesante. Llegada la hora ella se vistió y se marchó.
Me agradó bastante el servicio. Quizá no sea la chica más despampanante, pero tiene cosas que soy muy importantes y valiosas. No es relojera, es buena conversadora, se implica, propone, tiene buen aguante físico, es buena persona, muy aseada. Esta es una opinión muy personal basada en mi experiencia, ya cada uno de los caballeros que visitan este foro y han tenido la amabilidad de leerme han de decidir si merece la pena el servicio con Emily.
17) Teléfono (celular o fijo) Y link web de contacto:
Link: https://co.mileroticos.com/escorts/emily-universitariafotos-100-reales-ven-disfruta-de-mi/25106965/
Teléfono: 3212005043
Ahora creo que está en Bogotá, pero siempre está viniendo.
