Khale
REGISTRADO
. Entre acompañadode un hombre bastante robusto, de cabello blanco, pantaloneta y tennis que llevaba un canguro terciado en la cintura. Nisiquiera nos saludamos. Nos hicieron la requisa habitual e ingresamos al área de recepción. Hoy, a mediodía, éramos cinco ociosos los que esperábamos sentados en la sala de la clínica del doctor amor a que se presentaran las nenas. En la esquina había un hombre trigueño de cabello negro que movía la pierna con nerviosismo, seguramente deseoso de escoger de una vez el culo que iba a comerse. Las mujeres empezaron a desfilar. El hombre nervioso invito a una morena delgada de vestido negro a sentarse y ella se rehusó. Seguramente es de los que se enamoran de las puntas y empiezan a adecuarlas, cómo quiza nos ha pasado a todos alguna vez en esta vida. Lo cierto es que no vi muchas nenas lindas. De repente apareció Michel. 26 años bien vividos y deliciosamente llevado debajo de una blusa blanca descubierta y unos jeans que dejaban adivinar el enorme culo que tiene. Su rostro es, sin duda, exotico: los ojos cafes ligeramente rasgados, los labios carnosos y un lunar justo al lado izquierdo de la boca. Nos hicimos atrás y hablamos un rato. Le pregunté si daba mamadas sin condon y dijo que no. En ese momento dudé en entrar con ella. Sin embargo, al verme pensativo me dijo: subamos, quién sabe de qué puedas convencerme. Asumi el riesgo. Subimos y no me arrepiento. La nena es amable, conversadora y respetuosa. No me gustan las muy lanzadas: creo que estás fingen de principio a fin. A una mujer amable y contenida que cumple su servicio es mas fácil identificarla cuando ha empezado a disfrutar del sexo.
Le pedí que se cambiara la ropa interior porque tengo un fetiche con la lenceria. Se puso un sosten negro de encaje y unas tangas diminutas con pedrería en la parte posterior. El hilo dental resaltaba su culo redondo y firme y de inmediato tuve una ereccion. Ella analizo al paciente. Soy un tipo decente y procuro estar siempre bien presentado. Qué quieres al fin? Te lo chupo sin preservativo?, preguntó. Yo, sin dudarlo un instante, le dije que si. Da unas mamadas deliciosas. Se toma su tiempo y gradualmente va metiéndose lo todo en la boca. Su respiración era pesada y difícil mientras me la.mamaba. la cogí de la cabeza y me di cuenta de que tenía extensiones. No me aguante las ganas y le bajé hasta que tuvo un orgasmo. Mientras le lamia el clitoris con la lengua, la penetraba con el dedo índice. Ella no se implicó, no hizo contacto visual conmigo. Solo estaba sintiendo. Pero de repente mis dedos empezaron a inundarse de sus fluidos, justo antes de que separa es mi cabeza de su cálida y humeda chicha.
En ese momento la penetre. Hablamos poco, nos miramos menos, pero no era necesario. La comunicación que teníamos era gobernador por el bajo vientre. Había cosas por hacer, no palabras por decir. Le di verga en misionero, en cuatro, de lado, se subió encima de mi de frente e invertido. La puse boca abajo y la penetré desde atras y así, de repente, justo antes de terminar la primera hora, me eche un gratificante y necesario polvo de viernes al mediodia. Después hablamos un rato y cuando era hora de pararnos y salir, le miré el delicioso culo.que tiene y tuviese nuevo una erección. Nos echamos el segundo, iniciando de nuevo con una magnífica chupada de guevas y de verga. Después de treinta minutos llamaron y tuvimos que salir.
Ella se.va el lunes para su ciudad. Según me dijo, vuelve dentro de tres meses. Tiene un hija pequeña. Es una mujer atractiva y aunque no promete nada durantes negociación, es posible conseguir pequeñas victorias en el acto. La recomiendo. Costo: 150.000
Le pedí que se cambiara la ropa interior porque tengo un fetiche con la lenceria. Se puso un sosten negro de encaje y unas tangas diminutas con pedrería en la parte posterior. El hilo dental resaltaba su culo redondo y firme y de inmediato tuve una ereccion. Ella analizo al paciente. Soy un tipo decente y procuro estar siempre bien presentado. Qué quieres al fin? Te lo chupo sin preservativo?, preguntó. Yo, sin dudarlo un instante, le dije que si. Da unas mamadas deliciosas. Se toma su tiempo y gradualmente va metiéndose lo todo en la boca. Su respiración era pesada y difícil mientras me la.mamaba. la cogí de la cabeza y me di cuenta de que tenía extensiones. No me aguante las ganas y le bajé hasta que tuvo un orgasmo. Mientras le lamia el clitoris con la lengua, la penetraba con el dedo índice. Ella no se implicó, no hizo contacto visual conmigo. Solo estaba sintiendo. Pero de repente mis dedos empezaron a inundarse de sus fluidos, justo antes de que separa es mi cabeza de su cálida y humeda chicha.
En ese momento la penetre. Hablamos poco, nos miramos menos, pero no era necesario. La comunicación que teníamos era gobernador por el bajo vientre. Había cosas por hacer, no palabras por decir. Le di verga en misionero, en cuatro, de lado, se subió encima de mi de frente e invertido. La puse boca abajo y la penetré desde atras y así, de repente, justo antes de terminar la primera hora, me eche un gratificante y necesario polvo de viernes al mediodia. Después hablamos un rato y cuando era hora de pararnos y salir, le miré el delicioso culo.que tiene y tuviese nuevo una erección. Nos echamos el segundo, iniciando de nuevo con una magnífica chupada de guevas y de verga. Después de treinta minutos llamaron y tuvimos que salir.
Ella se.va el lunes para su ciudad. Según me dijo, vuelve dentro de tres meses. Tiene un hija pequeña. Es una mujer atractiva y aunque no promete nada durantes negociación, es posible conseguir pequeñas victorias en el acto. La recomiendo. Costo: 150.000
