Frank Miller
RECONOCIDO
En mi película (El club de la pelea) dije: "La belleza está en los ojos de quien mira..."
Los filtros de los celulares, son el nuevo cáncer. Lo peor es que nadie le va a poner freno, pues vende que da miedo.
Me tomo la selfie, veo como quedé y, carajos! Soy Brad Pitt!. Llego a mi casa, me veo en el espejo para ver lo guapo que soy y celebrar lo bien que me fue con las mujeres en la calle... y mis hombros caen, mi boca escapa de la sonrisa y mis ojos me dicen que soy otro: Joe, el organismo arbitrario de Tyler Durden.
Así son muchas de las carnes frescas que hay estos días en Mile. En sus fotos son unas diosas y lo más caprichoso es que ellas se creen que son tan bellas como el filtro de la cámara del cel les dice que son, (porque ni siquiera es Photoshop, ese dispendioso trabajo ya no es necesario).
La que presenta acá tal vez tiende a eso pero quisiera un par de opiniones más. Lo que fue conmigo fue que pues, al llegar a su presencia no encontré la chica veinteañera de las fotos. Apuesto a que ya pasó los 30. Quise probar una voluptuosa a ver qué se siente siliconiar pero definitivamente no me gustó.
En fin, la chica de cara angelical y perfecta no estaba; me atendió una señora con papada y pelo desgreñado. Las curvas armoniosas por las que planeé resbalar estaban algo... abruptas. Las piernas limpiamente contorneadas que quería acariciar no eran esculpidas por un mítico artista. Encontré una cintura ancha y cola levantada pero sin signos de gimnasio lo que la hace desarmonioso para la vista.
Estoy muy seguro que un gran puñado de hombres disfrutan de una mujer así, con nalgas y senos grandemente operados aunque la estética haya pasado sin hacer cambuche. Lo que es de mi, no volveré a estos ratos porque comprobé que, para mí son malos. Volveré a mi vieja confiable de llegar a un spa, hacer diagnóstico físico, leer miradas y así escoger una diva que pase por lo menos ese primer filtro humano.
Chupada con preservativo, misionero, doggy style, borde de cama, trato bueno perfectamente fingido, deslechada y chao.
El mensaje de ste post es... "no es la de las fotos" porque no me interesó buscar trato de novios ni 69, ni comentar los deportes después de la faena, solo me vestí, tomé mi maletín y me despedí como un caballero.
Pd: no la pongo en el tema de lista negra porque considero que faltarían más opiniones para meterla en ese saco. Por ahora ojalá vayan a visitarla y traigan opiniones. Son $100.000 la media hora.
Los filtros de los celulares, son el nuevo cáncer. Lo peor es que nadie le va a poner freno, pues vende que da miedo.
Me tomo la selfie, veo como quedé y, carajos! Soy Brad Pitt!. Llego a mi casa, me veo en el espejo para ver lo guapo que soy y celebrar lo bien que me fue con las mujeres en la calle... y mis hombros caen, mi boca escapa de la sonrisa y mis ojos me dicen que soy otro: Joe, el organismo arbitrario de Tyler Durden.
Así son muchas de las carnes frescas que hay estos días en Mile. En sus fotos son unas diosas y lo más caprichoso es que ellas se creen que son tan bellas como el filtro de la cámara del cel les dice que son, (porque ni siquiera es Photoshop, ese dispendioso trabajo ya no es necesario).
La que presenta acá tal vez tiende a eso pero quisiera un par de opiniones más. Lo que fue conmigo fue que pues, al llegar a su presencia no encontré la chica veinteañera de las fotos. Apuesto a que ya pasó los 30. Quise probar una voluptuosa a ver qué se siente siliconiar pero definitivamente no me gustó.
En fin, la chica de cara angelical y perfecta no estaba; me atendió una señora con papada y pelo desgreñado. Las curvas armoniosas por las que planeé resbalar estaban algo... abruptas. Las piernas limpiamente contorneadas que quería acariciar no eran esculpidas por un mítico artista. Encontré una cintura ancha y cola levantada pero sin signos de gimnasio lo que la hace desarmonioso para la vista.
Estoy muy seguro que un gran puñado de hombres disfrutan de una mujer así, con nalgas y senos grandemente operados aunque la estética haya pasado sin hacer cambuche. Lo que es de mi, no volveré a estos ratos porque comprobé que, para mí son malos. Volveré a mi vieja confiable de llegar a un spa, hacer diagnóstico físico, leer miradas y así escoger una diva que pase por lo menos ese primer filtro humano.
Chupada con preservativo, misionero, doggy style, borde de cama, trato bueno perfectamente fingido, deslechada y chao.
El mensaje de ste post es... "no es la de las fotos" porque no me interesó buscar trato de novios ni 69, ni comentar los deportes después de la faena, solo me vestí, tomé mi maletín y me despedí como un caballero.
Pd: no la pongo en el tema de lista negra porque considero que faltarían más opiniones para meterla en ese saco. Por ahora ojalá vayan a visitarla y traigan opiniones. Son $100.000 la media hora.
Última edición: