Como deje a cargo a mi hermano para que dirigiera mis comando me dedique al retiro pero cuando el deber llama toca actuar
Bueno camaradas, El domingo de resurrección. Tenía un pálpito. Me fume un habano y ese coiba me dio la inspiración. Escuché que Ashley estaba asentada en la capital del Atlántico y decidi planificar ese desembarco en Barranquilla. Le comunique mi intención de tomarme su fuerte, incluso haciendo caso omiso de algunos generales que me decían que por las fechas no era viable esa misión. Mi instinto militar me dijo, es el momento de atacar, ella recibió el mensaje y acepto mi código de guerra de inmediato.
A las 18:00 horas tenía pensado librar una guerra más grande que tenga registro la isla de Cuba.
Saque mi mapa, brújula y demás equipos de asalto y me diriji a las coordenadas calle 69 con 4# cerca a la clínica del norte. Esa base parece ser su nuevo lugar estratégico. Hice la logística necesaria para la operación y llegué al fuerte. Ese piso parecía inexpugnable y como los grandes rivales ella tomó su posición en el último cuarto. La topografía del sitio estaba preparada. Vi a la comandante Ashley frente a mi, muy sexy con un vestidito blanco que la hacía ver cómo una general de alto rango. Supe que la batalla iba a ser intensa cuando me regaló esa sonrisa. Conversamos, ella siempre muy amable, me presento sus términos y yo hice igual. 160 la hora dos relaciones.Oral con condón y todo su arsenal de ataques.
Me fui quitando el uniforme para ir preparando el ataque, ella va al baño para estar lista para el ataque. Cuando volvió que mujer. Mordidita de oreja, besito en el cuello y utiliza una estrategia con la que pudo terminar el conflicto de manera rápida, sino es por mi experiencia militar esto hubiese sido una guerra relámpago. Me sentó al borde de la cama y me hizo un baile suave, rico. Me gustó esos movimientos y prepare mi arsenal. Se acercó me puso el casco y me hizo un oral. Muy rico, me miraba para ver los daños de su ataque. Pero la artillería estaba bien. Resistió por un buen rato toda su ofensiva. Me tocó tomar posiciones defensivas cuando ella lanzó un ataque aéreo. Se subió y lanzaba ráfaga tras ráfaga. Sentia que esos ataques podían concluir el conflicto, resistimos, el pueblo cubano es fuerte y valiente. Cambiamos los roles y me dedique a la ofensiva, ella abajo con las piernas abiertas elevadas, y lance un ataque con bastantes efectivos, tratando de debilitar esas defensas. Eso la puso pasional y la guerra se puso intensa. Después de largo rato, le dije firma los términos de la rendición y la puse en 4 para darle un fusilamiento ejemplar y acabar con el enfrentamiento bélico con las fuerzas de ambos bandos agotadas.
La batalla de prolongó más alla de mis cálculos y el tiempo que tenía era muy poco para una segunda incursión. Dejé por el momento en acuerdo con la general una tregua. Y el tiempo que quedó lo empleamos para conversar, que tal le parecía Barranquilla y me dice que esa base le gusta. La invite a la isla jajaja y me sonrió con un solo si me invitas a un mojito. Me vesti, y le di mi saludo militar. Partiendo de nuevo a la Isla. Antes que la CIA intentará rastrear mi ubicación.
Desde la caída de la unión soviética he visto que los soldados de Barranquilla están frágiles. Se sienten vulnerables quejándose por todo. Que si no me contesta, que no me habló, que me habló duro. Que diría el che Guevara de esto. Si usted nota que una operación no va a salir como espera, mejor no la tome. Evite caer de baja. En este caso yo tomé esta operación y salí con aire de victoria. Estoy preparando unos misiles para celebrar esa batalla con destino a Washington. Nos estaremos suministrando información por medio de nuestras centrales de inteligencia. Hasta la victoria siempre. Patria o muerte venceremos
Con esto se despide su comandante y jefe.
Les ajunto un regalo
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