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RECONOCIDO
En Casi un año que llevo en esto, he estado con 8 venezolanas de las cuales solo una me dió una velada de diversión y sexo, Se llamaba Karla. Una chica de unos 1,68 de estatura, piel blanca reluciente pero apetitosa, cabello negro medio largo, cara bonita pero no de tierna prepago (+18) sino más bien de traviesa. Lastimosamente no tengo fotos de ella ni link porque solo estuvo un par de semanas en Barranquilla en un afamado spa llamado Zero Stress.
Lo cierto es que ya me siento con experiencia de decir que las venezolanas son mal polvo y se creen que le están haciendo un favor a uno con dejarse comer.
Debe ser los rumores que hay en el país desde que ellas llegaron, de que se veían ricas y bonitas, con su pelo largo negro y liso hasta las nalgas; sus lindas figuras resaltadas en algunas vendedoras de tinto que por cierto ya no se ven casi.
La ultima vez, hace una semana quise darles una ultima oportunidad y contacté a una. Lo hice sin querer. fue que cuando la llamé, mi oído sintió su inconfundible acento caraqueño, y vean que las que no son de Maracaibo son las que se creen más, y esta era una. Al momento de la charla y la forma mecánica de seducirme como cliente me indicaron que era, más que una fríbola, una indiferente en la cama. aún así fui y quise ganármela con mis encantos jeje. pero no logré mucho, lo supe porque de una me dijo que me desvistiera, y yo metiendo conversa y ella que me quitara la ropa, yo bueno, pero empieza tú, y si tranquilo en un rato. ¿Cómo es su acento venezolano? Ellas hablan algo así como tomando aire para articular palabras y al final de cada frase le agregan una especie de filo punzante que les da aire de superioridad y marca distancia entre dos partes del mundo. Esa vocalización cantaita' me ha llegado ya a fastidiar tanto, que no quiero saber más de una sexoservidora de ese país vecino. Cuando se desnudó, con esa actitud de estar chambiando, mirando al suelo, se colocó para que le diera en misionero y no se la había metido cuando ya estaba gimiendo, (por favor, disimulen). Fue cuando me vi estafado, pues a mi sexo no me falta. Buscaba una relación con aires de una aventura clandestina no cumplir un dese de comerme una diva venezolana que es lo que ellas se creen. En fin, creo que estas chicas se deben bajar del pedestal donde ellas se pusieron y atender con cariño y carisma de una dama de compañía.
No cambio a mis compatriotas de siempre por su bacanería, su soltura y entrega en la relación. Porque te miran a los ojos y te critican o alaban sin tapujos y con respeto. Son juguetonas y divertidas.
Las colombianas, más que todo las barranquilleras, son lo mejor!
Lo cierto es que ya me siento con experiencia de decir que las venezolanas son mal polvo y se creen que le están haciendo un favor a uno con dejarse comer.
Debe ser los rumores que hay en el país desde que ellas llegaron, de que se veían ricas y bonitas, con su pelo largo negro y liso hasta las nalgas; sus lindas figuras resaltadas en algunas vendedoras de tinto que por cierto ya no se ven casi.
La ultima vez, hace una semana quise darles una ultima oportunidad y contacté a una. Lo hice sin querer. fue que cuando la llamé, mi oído sintió su inconfundible acento caraqueño, y vean que las que no son de Maracaibo son las que se creen más, y esta era una. Al momento de la charla y la forma mecánica de seducirme como cliente me indicaron que era, más que una fríbola, una indiferente en la cama. aún así fui y quise ganármela con mis encantos jeje. pero no logré mucho, lo supe porque de una me dijo que me desvistiera, y yo metiendo conversa y ella que me quitara la ropa, yo bueno, pero empieza tú, y si tranquilo en un rato. ¿Cómo es su acento venezolano? Ellas hablan algo así como tomando aire para articular palabras y al final de cada frase le agregan una especie de filo punzante que les da aire de superioridad y marca distancia entre dos partes del mundo. Esa vocalización cantaita' me ha llegado ya a fastidiar tanto, que no quiero saber más de una sexoservidora de ese país vecino. Cuando se desnudó, con esa actitud de estar chambiando, mirando al suelo, se colocó para que le diera en misionero y no se la había metido cuando ya estaba gimiendo, (por favor, disimulen). Fue cuando me vi estafado, pues a mi sexo no me falta. Buscaba una relación con aires de una aventura clandestina no cumplir un dese de comerme una diva venezolana que es lo que ellas se creen. En fin, creo que estas chicas se deben bajar del pedestal donde ellas se pusieron y atender con cariño y carisma de una dama de compañía.
No cambio a mis compatriotas de siempre por su bacanería, su soltura y entrega en la relación. Porque te miran a los ojos y te critican o alaban sin tapujos y con respeto. Son juguetonas y divertidas.
Las colombianas, más que todo las barranquilleras, son lo mejor!